viernes, 26 de octubre de 2007

AMARGADOS


A veces nos encontramos a lo largo de nuestra vida, con gente que tiene tanta amargura dentro de sí; que no puede soportar, que las personas de su entorno, sean tan felices, sean dichosas ó simplemente, sean consciente de lo que hacen.
Los descerebrados, disfrutan haciendo el mal; pues no, soportan, que en su entorno, disfruten de esa felicidad, que ellos carecen.
No soy persona provocadora, no me gusta provocar. Pienso, que los malos momentos, las discusiones con tu gente, van a venir sin que les llames, entonces, ¿ porque llamarlo ?, sin necesidad alguna.
Bueno, a decir verdad, me gusta provocar, pero de una manera irónica e inocente, sencilla, bromeando y poder pasar un rato agradable con las personas que están a tú lado.

Cuando digo, no me gusta provocar, es hacer el mal por el mal. Enseguida reconoceremos a estos sujetos ó manada de amargados. Suelen tener, cara de sapo, no sonríen; porque desconocen la sonrisa. Les gusta llevar el control de las cosas y de las personas. No soportan los piropos bonitos; pues piensan, que es de una cultura decadente y poco inteligente.
Tienen un cinismo en su interior, que le es difícil esconderlo. Cuando hacen el mal, lo hacen con tanta pasión, que tampoco lo pueden disimular.
Hay tres soluciones para combatir a esta plaga, que se mueve por nuestros alrededores.
- Combatir con sus mismas armas... No es buena idea contrarrestar con sus mismas armas. Ya que como tú, no eres como ellos, tú conciencia, te llama la atención y no te lo permite. Y, posteriormente, no te encuentras cómodo contigo mismo. Tú, conciencia es como una jueza, que no te permite llevar al cabo la maldad.
- No entrar a su trapo... Si no entras en su juego, suelen violentarse mas, ya que ven que no surgen efectos su maldad. Hay que estar preparados. Su próxima gamberrada, puede ser mas grave y podía tener consecuencias. Pero, si estas preparado y controlas, llegaran a cansarse y desistir, en su empeño é irán en busca de otra victima.
- ¿ Tercera opción ?... Llamar a unos amigos de los descendientes de Lucky Luciano y que hagan un trabajo limpio y que parezca la gestión, un accidente, sobre todo, que parezca un accidente.
Esta última opción, es la más segura, pero también la mas peligrosa. Pues es muy probable, que algún confidente, se vaya de la lengua. Y, tengas que pasar, una larga temporada a la sombra y no precisamente la Taurina. Así, que, la mejor opción es la segunda. Aguantar hasta que se cansen ó cojan una depresión, a ver que sus acciones, no surgen efectos.




4 comentarios:

EGOSTEIN dijo...

Cuarta opción..., presentarle estos amargados a los que nos caen mal y así matamos dos pájaros de un tiro.

Anónimo dijo...

Me gusta esa opcion egostein...
Aunque propongo una quinta..
Oculta tu malestar con una sonrisa,a veces pueden ser como los bostezos..se contagian.

lola dijo...

Hola, yo creo que lo mejor es ignorarlos. Lo de Lucky Luciano no te lo recomiendo, es bastante peligroso jajaja. Saludos!

MeRCHe dijo...

Tú dando ideas...
Yo estoy con Lola, hay que ignorar a esas personas, porque ya hay bastante violencia en la sociedad como para ir sembrando más. Aunque de todas formas lleva un punto en que nos cansamos de aguantar.
Besitos